5 de junio de 2009

Así en plural

Voy a contar una historia que a mi se me ha ocurrido. Érase una vez hace tanto tiempo que es difícil recordarlo. En un punto africano, de golpe, sorpresivamente, aparece un puñado de seres humanos. Sus padres son, unos homínidos peludos, y ellos va a ser el germen de nuestra especie.
Hay quién se atreve a decir, sin pruebas empíricas, que de golpe nacen, en poco tiempo, una generación diferente. Parece ser, que ocurre así en los batracios.
Unos bebes más torpes, menos peludos, son cuidados y amamantados por sus madres, tan velludas, y van creciendo, y el tiempo los revela no tan torpes, más bien ingeniosos, más listos, más cuidadosos. Ahora son, el orgullo de sus padres que no entienden a sus hijos, pero no les importa.
Y estos niños y jóvenes, ralos de pelo. ¿Se preguntarían de donde salen? Pues sus padres son torpes y feos, lo que hoy diríamos, impresentables para los amigos.
¡Bueno los otros padres no son muy diferentes!.
-Ya sabes, los otros padres son igualitos.
A veces ensueñan que sus padres son otros más ... presentables. A veces creen que algún error ha ocurrido.
-Eso persiste. Y sus hijos luego, también pensaron que los padres eran otros, hasta hoy que, a veces pienso que se equivocaron y me cambiaron en el paritorio del hospital.
Tiempos duros para un hormonado adolescente.
Pudieron ser pacíficos, pudiera ser.
Y se multiplicaron entre ellos (unos 500 de diferentes padres), pues no eran atractivos para sus primos homínidos, y luego fueron tantos, que fueron mayoría, y ocuparon eso que hoy llamamos nicho ecológico.
Y corrió el tiempo y vinieron milenios -- 80.000 años dicen -- como quién no quiere la cosa.
Y vuelve a ocurrir, otra variación, pero esta vez sólo en los varones, pues estos nacen con un cromosoma diferente -- ¿defectuoso? -- el cromosoma Y. Y ahora los machos llevan el par XY.
Son parecidos, tal vez más brutos, más caprichosos y egoístas, por fuera parecen más grandes, por dentro, algunos son feroces.
- SE MASCA LA TRAGEDIA